Calidad es un término que depende del concepto personal de cada uno, pero se puede resumir como la satisfacción de las necesidades y expectativas de quién adquiere un producto o servicio, y mejor aún si sobrepasa esas expectativas.
La educación no debe preparar a personas que solo son capaces de desarrollar cierto trabajo o que solo puedan dominar ciertas teorías. El compromiso de la educación es formar a personas capaces de enfrentar las experiencias que la vida le presenta, personas capaces de crear su propio conocimiento teniendo como base las vivencias anteriores y que fueron significativas.
Los países deben de ver a la educación como un aspecto prioritario dentro de los procesos de desarrollo, deben ver a la educación como una oportunidad de formar a mejores ciudadanos que colaboren a la superación social, y no como un problema al que hay que invertirle grandes cantidades de fondos.
Para lograr calidad en la educación es importante realizar proyectos que permitan mejorar y avanzar hacia el desarrollo.
Los tiempos, las personas, la tecnología cambian, sin embargo, la educación parece no cambiar ni actualizarse. Es compromiso de todos los encargados de la educación ponerla al nivel que la sociedad actual necesita para responder a sus necesidades presentes y encaminarlos al futuro.
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